Esta es una de las actitudes que aparece en las fases más avanzadas de una relación. Un problema que tiene mucho más que ver con la inconformidad con uno mismo, que con un verdadero rechazo al otro.
Algunas personas se aferran a visiones idealizadas de la relación perfecta y se enojan o desesperan cuando su pareja resulta ser simplemente humana. A menudo dicen cosas como: "Si ella me amara, ella..." o "el hecho de que peleemos significa que no deberíamos estar juntos". Un cliente se quejó: "Mi prometido debería hacerme sentir como una princesa", mientras que su pareja se quejaba de que sus demandas reales ponían en peligro su cuenta bancaria y su paciencia y hacían que su relación pareciera terriblemente desequilibrada.
Este punto va directamente relacionado con la falta de tolerancia a opiniones distintas a la nuestra. No podemos agredir o menospreciar a una mujer y calificarla de ‘poco feminista’ sólo por no pensar igual que nosotras.
Las necesidades en las relaciones de pareja se modifican con el transcurso del tiempo. En los primeros momentos, cuando la fase de enamoramiento está en auge, suelen esconderse las necesidades individuales de cada uno.
Como afirma la monja budista Tenzin Palmo: “El apego dice: te amo, quiero que me hagas feliz. Y el amor genuino dice: te amo, quiero que tú seas feliz.
Son muchos los casos en los que se comparan las relaciones de pareja que tienen los demás con la de uno mismo, resaltando los puntos débiles del compañero.
Por ejemplo, hay una cierta coincidencia en señalar que nos enamoramos un promedio de siete veces a lo largo de nuestra vida. No siempre con la misma intensidad y, por supuesto, no siempre concluye en una relación.
En una relación de pareja es ordinary que aparezca la necesidad de encontrar una identidad compartida, para hacer más fuerte el vínculo y alejarse de los conflictos y las contradicciones.
En la encuesta hecha por la application a two.500 hombres y mujeres mayores de eighteen años en México, se revela una percepción de la realidad muy distinta entre un género y otro sobre temas como la equidad de género, la brecha salarial, el matrimonio o la maternidad.
Conocerlos es una buena manera de afrontar los problemas y también de saber cómo afrontar una relación para conseguir que tenga éxito y que sea duradera.
Las relaciones tienen sus momentos buenos y sus momentos no tan buenos. Debemos poner los pies en la check it out tierra y así las desilusiones serán menores.
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Muchas veces las discusiones son sanas porque ambos pueden defender sus puntos de vista y llegar a un acuerdo, no obstante, pelear por las cosas más simples puede llegar a un hartazgo que termine por alejarlos. –
Uno de los errores que más cometen las personas durante la primera salida es creer o convencerse de que la otra persona es “la elegida”, con quien van a establecerse, incluso casarse.